martes, 29 de mayo de 2018

3 frases que toda mujer debe decirle a su esposo



1.- "Eres muy atractivo"
Pero no uses la palabra "atractivo", utiliza, más bien, palabras como guapísimo o sexy cuando estén juntos. Los hombres no suelen comunicar esta necesidad a menudo, e incluso a las mujeres puede parecerles que esto no es importante para ellos. Tu esposo quiere saber que él se ve bien cuando salen en citas o cuando se arregla para ir a la iglesia.
2.- "Te apoyo"
Si es que tu esposo está soñando con el futuro o está intentando hacer algo que está fuera de su zona de confort, y después de conseguir un ascenso de trabajo: él tiene que saber que tú lo apoyas. Tú debes de ser su animadora estrella en los momentos más importantes de su vida.
3.- "Ve a pasar un tiempo con tus amigos"
Los amigos de tu esposo son importantes. Y son importantes para su bienestar emocional, pero también para tu matrimonio. Si él puede pasar tiempo regularmente con amigos, le ayudará a estar más activamente presente cuando está contigo.

¿Quieres que él te pida matrimonio?


1. Sé realista con respecto a tu relación
Por ejemplo, pregúntate: ¿tienen futuro?, ¿comparte él tu visión de pareja?, ¿la relación marcha bien?, ¿cuentan con lo necesario para aventurarse a ser un matrimonio?, ¿quieres casarte porque deseas pasar tu vida a su lado, o simplemente sueñas con el ritual de la boda?
2. Habla claro sobre tus deseos
Hazle saber lo que opinas del matrimonio, y pregunta su opinión al respecto. Si no está a favor, no te engañes, las posibilidades de que cambie de idea son pocas. No es lo mismo no estar preparado, que no desear casarse. Que la información te sirva para planear tu futuro.
3. Aclara sus dudas
Y claro: haz que él responda tus preguntas. Muchas veces, el tema económico es lo que detiene a los hombres a dar el paso. Aunque los tiempos han cambiado, ellos siguen siendo los que se ven más afectados en este sentido ante una separación. Para ambos, dejar en claro qué pueden esperar y a qué se comprometen, puede ser de gran ayuda para decidirse.
4. Ultimátum no, pero plazos sí
Les guste o no, las mujeres tenemos un reloj biológico que debemos de tener en cuenta. Es importante que sepas qué tanto estás dispuesta a esperar, y que él también lo sepa, así lo que pase será bajo su propio riesgo. No se trata de presionar, pero tampoco de dejar las cosas al azar.
Si después de que han pasado juntos suficiente tiempo, de que en el amor no hay dudas, de que se ven y comportan como pareja, y no pones tu dignidad en riesgo, entonces ponle fecha a tu 29 de febrero. Si ya en el siglo VI las mujeres tomaban la iniciativa, que tú lo hagas en el siglo XXI no es tan descabellado. Lo peor que puede pasar es que descubras que en realidad eres tú la única que quiere casarse.